Educación en la Desdramatización

desdramatizar
Cuando nuestros padres nos dijeron «Eso no es nada» cuando nos heríamos jugando, o «no pasa nada» cuando creíamos que lo que nos había pasado era muy grave (perder algo por ejemplo), o cuando decía «lo habrá hecho/dicho sin querer» cuando otro niño nos ofendía o decía algo que nos hacía sentir mal o humillados, nos estaban enseñando a DESDRAMATIZAR.
no-pasa-nada
¿Por qué ya no valen estas técnicas como adultos? Porque no nos lo creemos. Vivimos descreídos. Estamos atentos a la ofensa del otro, y más si lo hace públicamente delante de otras personas. Nos sentimos obligados a defendernos, a defender nuestra Honra, para demostrar a los demás que no somos débiles, para que no se aprovechen de nosotros. Si dejas pasar una supuesta ofensa, siempre habrá alguien que te susurre cosas como:
 

  • ¿No vas a hacer / decir nada después de lo que te ha dicho?
  • ¿Pero cómo permites que te haga o diga eso?
  • Si yo fuera tú, le pondría en su sitio

ofendido
El refranero español a veces nos inclina a tendencias para no “olvidar lo sucedido” como aquel que dice: “A quien hierro mata hierro muere”. Que genera una sensación de venganza frente a cualquiera que creemos nos ha ofendido. Esa sed de venganza es la que impide “dejar pasar” las cosas y genera resentimiento y rencor
a-quien-hierro-mata-a-hierro-muere
Constantemente decimos a nuestro cerebro, le bombardeamos con un » Sí que pasa, no lo dejes pasar, reacciona, defiéndete, agrede tú también».
La opción que escogemos normalmente es dramatizar e inclusive teatralizar nuestra actitud  para demostrar algo: ser fuertes, dar pena, exagerar el daño para esperar compensación……..
Más que dramatizar, sobredramatizamos. Exageramos en muchas ocasiones para conseguir un impacto en los demás, que nos vean como personas fuertes y seguras de sí mismas
¿Has probado en restar importancia?. Me refiero a “dejarlo pasar”, dejarlo ir, que no se quede con nosotros, que pase de largo, que se vaya, que no permanezca en nuestro tiempo.
dejar-pasar-la-ofensa
En un post anterior titulado El Perdón mencionaba algo que quiero recuperar ahora

El Perdon


En hebreo perdón es “athiemi” que significa dejar ir, soltar, desatar, alejar. Hay que tomar en cuenta que perdonar no significa necesariamente reconciliarse con la otra persona, ya que a veces esto no se pude debido al gran daño producido o no se quiere volver a ser igual o tener la misma situación que antes de la ofensa. Esto no impide el perdón. Puedo perdonar y no reconciliarme.
¿Eres capaz de desdramatizar y “dejar ir” tu enfado? ¿Qué le vas a decir a tus hijos cuando se enfaden con alguien?
Sígueme en Twiter @AngelLargo1970
 

Comentarios

Escribe tu comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

Entradas más visitadas